Los chefs Iker González y Juanjo Solano presentan los platos emblemáticos de Picador, elaboraciones inspiradas en sabores tradicionales y bocados típicos de Málaga que se presentan como el plan ideal para los meses de verano.
La temporada estival ha llegado a Málaga, llenando sus días de luz, sus pueblos de olor a mar y sus calles de vida. Si hay una estación del año que define a la perfección la tradición malagueña, ésa es el verano, caracterizado por su ambiente festivo y las ganas de disfrutar. Como escribió Antonio Machado: “Junto al agua negra, olor de mar y jazmines. Noche malagueña”. Porque no hay nada que acompañe mejor a las noches andaluzas que salir a la calle y disfrutar de su gastronomía. Fiel a la esencia malagueña, el restaurante Picador, desde su ubicación privilegiada en el resort La Zambra y con los chefs Iker González y Juanjo Solano al frente de su cocina, presenta sus platos emblemáticos: recetas tradicionales que rinden homenaje a la cultura andaluza con un estilo vanguardista y desenfadado.
Dando continuidad a su propuesta culinaria, entre los platos emblemáticos del restaurante pueden degustarse elaboraciones típicas de la región, como las croquetas cremosas de choco, puntillas y chimichurri de tomate seco. Otra de las recetas más destacadas de Picador son las patatas rotas, fritas y bravas, cocinadas con piel para otorgarles una textura más crujiente y acompañadas de salsa verde con shiso y jalapeño. Asimismo, una visita a Picador permite degustar exclusivos platos en los que la carne ocupa un lugar protagonista, como la presa ibérica con cremoso de boniato, que fusiona sabores antagónicos que combinan a la perfección; o el tartar de solomillo de vaca vieja del país sobre pan brioche. Por último, para dar el toque final dulce, Picador cuenta con grandes clásicos del recetario andaluz en clave moderna, como su particular torrija rellena con un praliné de frutos secos.
Además, a estos platos emblemáticos se suman nuevas recetas que respetan al máximo la temporalidad del producto, como el gazpachuelo, típico de Málaga y sopa fría del verano por antonomasia, con un toque diferencial: base con patata, mayonesa y fumet para luego emulsionar con aguacate de La Axarquía para lograr una textura aún más cremosa. Esta elaboración se completa con el pescado del día y coliflor para aportar mayor sabor. También son indispensables los arroces en la carta de Picador, destacando el arroz cremoso de bogavante, un ingrediente de gran calidad y valor, acompañado de salsa holandesa con piel de limón encurtida, que aporta un toque cítrico y una textura cremosa; y, por otro lado, el arroz a la llauna con chivo y naranja amarga, una versión particular de la receta clásica con un arroz del senyoret adaptado a los sabores de Andalucía.
La oferta gastronómica de Picador se complementa con una carta líquida compuesta por más de 90 referencias nacionales e internacionales, dando especial protagonismo a los vinos de la región. Espumosos, champagnes, tintos, blancos y rosados, así como finos dulces y generosos constituyen la extensa propuesta que se completa con una gran variedad de cócteles, vermuts y licores. Se podrán probar vinos y champagnes de alta gama por copa, como Vega Sicilia, Baron de Rotschield, Louis Roederer, Chablis “Le Clos”. También un Sherry Corner con finos tan únicos como La Bota de Oloroso Viejísimo Bota No Nº 98, 1955 Palo Cortado, Urium Oloroso.
Sobre Iker González Ayerbe
Apasionado de la cocina desde muy joven, Iker estudió en la Escuela Superior de Hostelería y tras realizar un máster en el Lycée Hôtelièr du Biarritz, comenzó su carrera en las cocinas del Hotel Du Palais de Biarritz de la mano del chef Jean-Marie Gautier. Anteriormente, Iker ha trabajado en restaurantes y hoteles de renombre a nivel mundial, como el restaurante de Martín Berasategui o Zuberoa junto con el chef Hilario Arbelaitz, entre otros.
Sobre Juanjo Solano Fonseca
Natural de Costa Rica, Juanjo convirtió su gran pasión por la cocina en su profesión a los 17 años. Después de realizar una licenciatura en gastronomía y ganar experiencia en el sector de la hostelería, estudió Administración de Empresas, que le permitió ganar conocimientos en dicha materia y abrir su propio restaurante en su tierra natal.