Hasta el 28 de noviembre, los chefs Sergio Solano y José Carlos García ofrecen cuatro elaboraciones exclusivas fuera de carta protagonizadas por los productos otoñales por excelencia.
Cuando las temperaturas bajan y las horas de luz disminuyen, los aromas y sabores del bosque se convierten en protagonistas del día a día. Con esta premisa, Balausta, ubicado en el corazón cultural y gastronómico de Málaga, estrena las “Jornadas de setas y caza”, que rinden homenaje al otoño poniendo en valor los productos estrella de la temporada: la carne de caza y las setas.
Hasta el 28 de noviembre, bajo el mantra perpetuo de ser fieles a la cocina andaluza y a la temporalidad del producto, Sergio Solano como jefe de cocina, junto a José Carlos García como asesor gastronómico, ofrecen cuatro elaboraciones otoñales protagonizadas por la carne de caza y las setas. Guiso de setas con cremoso de patata trufado y caldo de ave reducido; níscalos al ajillo con consomé de jamón ibérico Dehesa de los Monteros y su papada curada; lomo de venado a la brasa con cremoso de batata asada, níscalos al sarmiento y castañas asadas con salsa bordalesa; y perdiz en salsa cazadora con angulas de monte y cebollitas glaseadas forman el escaparate de platos fuera de carta que representan de la manera más pura los sabores de esta temporada


“En Balausta siempre buscamos el mejor producto de temporada y lo tratamos con técnicas que rinden homenaje a la cultura gastronómica tradicional malagueña”, explican José Carlos y Sergio. “Estos platos fuera de carta ponen de manifiesto el deseo del restaurante de ofrecer una gastronomía cuidada y completamente disfrutable, partiendo de la mejor materia prima y con un maridaje a la altura de este proyecto”, añaden los chefs.

Para acompañar estas jornadas de setas y caza, el equipo de Balausta ha seleccionado de manera exclusiva cuatro referencias de vinos que se presentan como el maridaje perfecto para los productos protagonistas de esta estación. Dos de ellos cuentan con D.O. Sierras de Málaga, Vidueños de Sedella y Las Jacintas, convirtiendo a Balausta en el enclave ideal donde apreciar la historia, la tradición y la cultura características de esta región. La propuesta se completa con referencias autóctonas de Francia: M. Chapoutier Les Meysonniers A.O.C. Crozes Hermitage y Château Laribotte A.O.C. Sauternes.
Desde su ubicación privilegiada en el patio interior de un palacio del siglo XVIII en pleno centro de Málaga, Balausta ofrece un espacio en el que se respira la tranquilidad y la calidez propias del proyecto. Antonio Obrador es el estudio encargado de firmar el interiorismo, en el que han marcado una ambientación muy malagueña y hacen uso del ladrillo, muy típico de los palacios de la época. Los clásicos zócalos andaluces han sido reinterpretados con rafia para lograr un toque más innovador. En el patio se han recuperado columnas del antiguo edificio ahora restauradas, que se integran en la decoración junto con réplicas de estas. Por su parte, las paredes están decoradas con “cordobanes”, piezas típicas de Córdoba confeccionadas con cuero repujado, esmaltes y pan de oro, un auténtico tributo a la cultura y artesanía andaluzas. La modernidad y la creatividad también están presentes en Balausta a través de elementos como el latón cortado al láser o el cristal tratado con ácido para aportar una nota de frescura, que contrasta a la perfección con los elementos constructivos y decorativos tradicionales, una gran obra arquitectónica.
