· Hasta el 24 de julio, el chef Antonio del Álamo, con una cocina caracterizada por el respeto a la calidad y temporalidad del producto, ofrece cuatro elaboraciones fuera de carta protagonizadas por el atún rojo.
· Además, para celebrar el cambio de estación, Casa Felisa también presenta nueva carta, en la que destacan platos como salteado de judías verdes con langostino nacional, tosta de patata y manitas, tortilla abierta con cocochas al pil pil o lomo de rodaballo salvaje a la brasa con chalotas y cebolletas.
Pocos cielos son capaces de igualar al de Madrid, caracterizado por su profundo color azul. Tal es su encanto que Velázquez, pintor oriundo de la capital, se enamoró de ellos dando lugar a los cielos velazqueños, plasmados en obras como La Rendición de Breda o en sus retratos ecuestres de la realeza. Para acompañar a los cielos despejados que el cambio de estación trae a Madrid y alimentar el alma con recetas tan únicas como ellos, Casa Felisa estrena carta protagonizada por los sabores más frescos de la temporada.
La nueva carta parte de un concepto fine neocastizo que eleva el recetario madrileño a través de platos con un giro contemporáneo. El chef Antonio del Álamo, uno de los cocineros más reconocidos de la historia culinaria de Madrid, incorpora en esta selección ingredientes y sabores acordes a la temporada estival actual y a sus elevadas temperaturas.

Para empezar y, como reza la carta, ir matando el hambre, a sus emblemáticos entrantes como los buñuelos de bacalao con mahonesa de ajo negro y la ensaladilla rusa con tortilla de camarones, se suman recetas que premian la estacionalidad de la materia prima, como la ensalada templada de tirabeques, espárrago verde y puerros jóvenes asados o el salteado de judías verdes, con langostino nacional, tosta de patatas y manitas. Además, uno de los clásicos de Casa Felisa, la tortilla abierta, estrena una nueva versión con cocochas al pil pil. Por su parte, reflejando el equilibrio entre tradición y contemporaneidad del restaurante, se mantienen el sándwich de croissant en molde con langosta y el sándwich de pan brioche con esturión ahumado y velo de papada ibérica.

Entre los principales, sobresalen platos traídos directamente de la costa como el lenguado salvaje a la meunière o el lomo de rodaballo salvaje a la brasa con chalotas y cebolletas. Para los más carnívoros, a los clásicos del restaurante como el steak tartar de solomillo de vaca madurada con torreznos y patatas fritas o el filete ruso de presa ibérica de bellota con tomate concassé, se une el exquisito T-Bone de 1kg. Para completar la propuesta, todos los platos principales pueden acompañarse de guarniciones como patatas fritas, pimientos de Guernica fritos, arroz blanco o las icónicas patatas soufflé. Igualmente, en la nueva carta no faltan arroces y pastas como los clásicos macarrones con tomate, chorizo ibérico y queso de Madrid o el arroz a la llauna con carabinero nacional, espárragos y judías verdes.

Como broche final, Casa Felisa propone una selección de postres en la que conviven recetas tradicionales y modernas. Milhojas casera de nata con frambuesa, torrija tibia de pan brioche casero con helado de vainilla, tarta hojaldrada de limón o merengue tostado y tarta de queso tibia son algunos de los dulces que se pueden degustar en esta nueva carta.
Asimismo, complementando esta propuesta culinaria y dando continuidad a la esencia del restaurante, siempre fiel a la estacionalidad del producto y al respeto por la máxima calidad de la materia prima, hasta el 24 de julio, Casa Felisa ofrece elaboraciones exclusivas fuera de carta en las que el atún rojo se convierte en protagonista y que combinan a la perfección las características únicas de este pescado, reconocido por su sabor e intenso color, con sabores tradicionales. Cuatro han sido las recetas elegidas: tartar de atún rojo con wasabi y soja; marmitako de atún rojo; ventresca de atún rojo con tomate soasado y remolacha a la brasa; y taco de atún rojo a las brasas con salteado de verduras y cremoso de zanahoria.

Para completar la experiencia, la oferta líquida de Casa Felisa presenta una oda a Madrid con cervezas artesanales y vinos madrileños, que se complementan con etiquetas de otras regiones e internacionales, contando en total con más de 140 referencias, entre tintos, blancos, rosados, generosos y espumosos. Asimismo, el restaurante otorga gran protagonismo al tradicional aperitivo madrileño, un momento único en el que se podrá degustar una suculenta variedad de vermuts y cócteles inspirados en creaciones clásicas que hacen referencia a momentos históricos de la capital.
A la ubicación ideal de Casa Felisa, ubicada en pleno barrio de Las Salesas, le acompaña un interiorismo a la altura de su cocina, obra del estudio Antonio Obrador. La paleta de colores, que gira en torno al rojo, negro y amarillo pastel, se aprecia en las cortinas de terciopelo, el decapado entre las vigas del techo, las paredes enteladas o el interior de las alacenas forrado con cuadros gustavianos. Estas alacenas contienen objetos que representan el día a día de Felisa, personaje ficticio que da vida a la filosofía del restaurante, al igual que las cajas de luz, uno de los puntos clave del espacio, en las que se muestran diferentes ilustraciones en relación con la rutina de Felisa, así como los rincones más icónicos de Madrid.
