· Don Lay recibirá el Año Nuevo Chino con platos especiales fuera de carta que podrán degustarse del 21 de enero al 5 de febrero.
· El restaurante cantonés ofrecerá una deliciosa selección de dimsums, un exquisito cabracho al vapor y una cazuela al estilo Sichuan para celebrar este hito de la cultura china.
新年快乐 (xīnnián kuàilè) o “Feliz Año Nuevo” en chino, será la frase más repetida en los próximos días entre la comunidad asiática. El próximo 22 de enero comenzará el Año del Conejo de Agua y con este, la oportunidad de llevar a cabo cualquier proyecto y alcanzar todas las metas que uno se proponga gracias a la fuerza, tenacidad y disciplina que confiere la combinación del animal con este elemento tan maleable que es el agua. Las personas que se encuentren bajo el horóscopo chino de este animal serán las más afortunadas durante este nuevo año y podrán superar cualquier adversidad con la ayuda de la férrea personalidad de su signo.

Para celebrar todas las cosas buenas que nos tiene reservadas el nuevo año, el restaurante Don Lay ofrecerá una selección de platos fuera de carta que estarán disponibles desde el 21 de enero hasta el 5 de febrero, coincidiendo con la celebración de este hito del calendario chino. Como no podía ser de otra manera, la fiesta comenzará con cuatro tipos de dimsums muy especiales como el de mero, elaborado con masa de trigo, infusionada con tinta de calamar, camarón, fideos de soja, bambú, sepas y huevas de pez capitán; el shao mai de bacalao, con masa de wontón rellena de bacalao, camarón, cacahuete, bambú, zanahoria y setas; los goutie de cerdo, con masa de trigo infusionada con zanahoria, cerdo ibérico y langostino, y para terminar, un rollito crujiente de erizo relleno de revuelto de huevo, fideos de boniato y huevas de erizo. Como principales, dos platos tan festivos como la cazuela de cordero con fideos de soja, col china, guindilla, pimienta de Sichuan y setas o su particular versión del “mar y montaña”, un cabracho al vapor con lomo ibérico adobado en soja, oreja de madera, guindilla y pimienta de Sichuan. El broche final a esta propuesta lo pone un guiño al Año del Conejo de Agua con un trampantojo de zanahoria de masa de arroz glutinoso rellena de soja roja y marrón glasé acompañada de un refrescante helado de yogurt.

Alzando la copa para brindar por el año nuevo, el restaurante cuenta con un cóctel especial: Jessica Rabbit, una mezcla elegante, sensual y picante creada a base de tequila blanco Don Julio, licor Humo, zanahoria, naranja y una pizca de sal. Esta opción se unirá a la variedad mixológica de clásicos y de la casa, que reflejan la personalidad exótica, elegante y sofisticada de Don Lay, introduciendo elementos que son tendencia en la coctelería actual. Todo ello se suma a las más de 100 referencias de vinos nacionales e internacionales, con un especial cuidado por el champán y el vino blanco, los cuales maridan perfectamente con los platos de la gastronomía china.

Con estas deliciosas incorporaciones, Nieves Ye, propietaria de Don Lay, compartirá con los comensales una pequeña parte de todas las tradiciones que se viven en torno a esta gran celebración que cada año la comunidad china ansía por festejar, esperando que el nuevo año traiga mucha fortuna y salud. El restaurante chino, que se convirtió en un local de culto gastronómico en el sur de la capital, cerró en 2015 tras más de 13 años de actividad. En 2019 recuperó su esencia, pero elevando los estándares de la tradicional cocina cantonesa, a través de su reapertura en un local situado en el barrio de Salamanca. Este Año Nuevo Chino es la oportunidad ideal de seguir brindando y celebrando la continuidad de Don Lay como uno de los templos de la cocina asiática más emblemáticos de Madrid.


Sobre Nieves Ye
Nacida en Zhejiang, un pueblo de la República Popular China, Nieves emigró a los 13 años a España junto con sus hermanos y su padre, quien se convirtió en un importante impulsor de la gastronomía china en la Península Ibérica. Con él, puso en marcha la idea de abrir un restaurante gastronómico de comida tradicional china para chinos en Madrid. Sin embargo, en 2001 el señor Ye falleció antes de que se abriese Don Lay. En su honor, Nieves siguió adelante con el proyecto inaugurando al año siguiente el restaurante en el Paseo de Extremadura y manteniéndolo hasta su cierre en 2015.
Con su formación en negocios, Nieves se ha convertido en una importante empresaria, reflejando su éxito con el restaurante Don Lay –que vuelve tras cuatro años como un restaurante de alta cocina china– y la fábrica y distribuidora de comida asiática Wan Run, aunque también está involucrada en proyectos más allá de la restauración.
